El color naranja de la calabaza ya nos indica su aporte
de beta-carotenos, pero también es rica en vitamina C y fibra, que nos ayudan a
regular nuestro tránsito intestinal.
La calabaza es algo más que ese vegetal que algunos
vacían por dentro para usar en Halloween. Los expertos en nutrición saben que
es un alimento imprescindible que deberíamos consumir mucho más.
La calabaza es deliciosa en jugos naturales, en cremas
frías para perder peso, en pasteles saludables e incluso scomo original
condimento en muchos de nuestros platos.
Asimismo, los veganos tienen en la calabaza uno de las
piezas clave de su alimentación. Vale la pena tenerla en cuenta, hacer uso de
la imaginación y consumirla del modo que más nos guste.
A continuación, te explicamos todo lo que puede hacer por
ti.
7 beneficios sorprendentes de la calabaza
1. La calabaza, más nutritiva de lo que pensamos
Hay muchos tipos de calabazas. La Butternut o de cacahuete, la calabaza
Moscada de la Provenza o la más clásica para preparar postres, conocida
simplemente como cabello de ángel.
Las hay más dulces y las hay que apenas tienen sabor y se
usan más como decoración. No obstante, en tus mercados seguro que estarás
pendiente de ellas y de sus variedades cuando llega el otoño, momento en que
empiezan a cosecharse.
Ahora bien, la calabaza es algo más que agua, pulpa y
fibra.
Una taza de calabaza cocida (unos 200 gramos) nos puede
aportar el 20% del valor diario de vitamina C, el 10% o más de la vitamina
E, y el 5 % de vitamina B6, ácido
fólico, hierro, magnesio, y fósforo.
La calabaza, además, es una de las fuentes más conocidas
de beta-caroteno, un poderoso antioxidante que le ofrece esa tonalidad naranja
tan característica, y que en nuestro organismo se convierte en vitamina A.
2. Reducirás tu presión sanguínea
Tal y como te hemos señalado con anterioridad, hay muchas
formas creativas de consumir calabaza. Una de ellas es mediante las sopas.
Conoce también los beneficios de consumir peras
Puedes combinarlas con lo que desees, con unas hojitas de
menta, con un pepino, piña, naranja, espinacas… Con lo que más te agrade.
La calabaza es buena para el corazón. Su contenido de
vitamina C, fibra y potasio nos ayudará a reducir la hipertensión.
El consumo adecuado de potasio es casi tan importante
como la disminución de la ingesta de sodio, en especial si tenemos
hipertensión.
3. La calabaza nos ayuda a perder peso
En una taza de calabaza fresca vas a encontrar solo 49
calorías. Gracias al agua y la fibra, vamos a conseguir una adecuada sensación
de saciedad.
Una forma original y sana de ir perdiendo peso es tomar a
lo largo de la semana purés de manzana y de calabaza.
Puedes incluir esta opción en tus cenas con algo de
proteína (un poco de pechuga de pavo, por ejemplo), y de este modo conseguirás
mejorar tu línea.
4. Nos protege frente al cáncer
Si mantenemos una dieta rica en zanahorias y calabazas
estaremos luchando frente a la aparición del cáncer. Queda claro que no lo
podremos prevenir al 100%, pero una buena alimentación y unos adecuados hábitos
de vida, siempre son garantía de una mejor salud.
La zanahoria, tal y como hemos señalado con anterioridad,
es rica en beta-caroteno. Este antioxidante es muy poderoso a la hora de hacer
frente a los agentes tumorales, así como a los radicales libres.
5. Las semillas de calabaza, muy relajantes
Cada vez que te prepares una receta con calabaza, no
deseches sus semillas. Son increíblemente ricas en triptófano, un aminoácido
precursor de serotonina. Este neurotransmisor es el que favorece un adecuado
descanso.
Vale la pena tostarlas un poquito y comerlas a modo de
aperitivo pero sin sal.
6. Cuida de tu sistema inmunitario
No hay nada mejor que mantener una dieta equilibrada y
balanceada. Algo tan sencillo como desayunar una taza de calabaza al horno con
unas nueces, por ejemplo, puede reforzar nuestras defensas.
A su vez, una receta deliciosa y saludable con la que
perder peso y aumentar nuestras reservas de vitamina C es la sopa de calabaza y
jengibre, que podemos prepararnos para cenar.
Una taza de calabaza cocida contiene unos 20 miligramos
de vitamina C (al día, necesitamos unos 60 miligramos), con lo cual, ya tenemos
cubierta una parte.
7. Adiós al estreñimiento
Las personas que sufran estreñimiento crónico deben
introducir en su dieta vegetales como la calabaza, los espárragos, las
zanahorias, las alcachofas o las acelgas.
El aporte de agua
y fibra de la calabaza es tan elevado que favorece el tránsito intestinal y,
además, mejora nuestras digestiones. Para beneficiarnos de ella, recuerda que
siempre será mejor consumirla lo más natural posible.
Puedes cocerla o prepararla al horno, pero no le añadas
azúcar. Si la combinas, por ejemplo, con un poco de canela, disfrutarás de una
combinación sensacional.
Para concluir, no se trata en absoluto de llevar una
dieta estricta a base de vegetales ricos en antioxidantes como la calabaza.
Solo es cuestión de mantener una alimentación variada.
No excluyas la proteína de las carnes magras de tu dieta,
así como la fibra de los cereales y las grasas saludables del aceite de oliva o
el aguacate.
La calabaza, por su parte, es un vegetal muy saludable
que podemos cocinar de increíbles formas.