Este
tratamiento facial de clara de huevo y cáscara de naranja está recomendado para
las pieles cansadas y con signos de flacidez.
Sus
principios activos la refrescan de forma inmediata y permiten que el proceso de
oxigenación se dé sin problemas para una renovación completa.
Puede
utilizarse como método de desintoxicación cutáneo, pero también como exfoliante
y astringente natural.
Ingredientes
- 1 clara de huevo
- 1 cucharada de cáscara de naranja (10 g)
- 1 paño limpio
- Agua helada (la necesaria)
Preparación
Coloca
a secar una cáscara de naranja al sol y tritúrala con un molinillo para
convertirla en polvo.
Cuando
esté lista, bate la clara de huevo y mézclala con el polvillo de la cáscara.
Asegúrate
de que quede bien integrado y procede a aplicarlo.
Modo
de aplicación
Antes
de empezar es importante aclarar que este tratamiento es nocturno. No se debe
utilizar durante el día porque la piel queda un poco sensible al sol.
Teniendo
esto presente, procede a limpiar el rostro para quitarle la suciedad
superficial y todo rastro de maquillaje.
Una
vez limpio, extiende el producto por todas las áreas, a excepción del contorno
de los ojos y los labios.
Déjalo
actuar durante 15 minutos y date un masaje.
Humedece
la piel con agua tibia y realiza movimientos circulares con las yemas de los
dedos.
A
continuación, sumerge el paño en el agua helada y aplícalo sobre el rostro.
Presiona
un poco y mantenlo en contacto con la piel durante un minuto.
Repite
este paso tres veces y enjuaga.
Sécate
bien y siente tu rostro fresco y rejuvenecido.
Úsala
una vez a la semana.
La
mayoría de beneficios de este tratamiento se consiguen luego de varias
aplicaciones. No obstante, vale la pena incorporarla en la rutina de belleza
para comprobar que es muy saludable para la piel.