Probablemente veas una ducha
fría como una de las cosas más terribles que te podrían pasar y, si estás
acostumbrado a bañarte con agua caliente, bajo ninguna circunstancia lo harías
por tu propia voluntad. Sin embargo, debes saber que los beneficios de bañarse
con agua fría son realmente sorprendentes.
En este artículo de
medicinanatural-alternativa te vamos a enseñar para qué es bueno bañarse con
agua fría y cuáles son sus principales ventajas. Después de leer, no vas a
querer ducharte con agua caliente nunca más!
Cuáles son las principales
ventajas de bañarse con agua fría:
Es un hecho comprobado. Las
duchas de agua fría son extremadamente beneficiosas para el ser humano, de
muchas formas y por muchas razones. Es algo completamente natural, pues pasamos
más tiempo de nuestra existencia bañándonos con agua fría que de la forma como
lo hacemos actualmente.
Empecemos…
#1
Tendrás más energía: Bañarse con agua fría aumenta el estado de alerta
Seguramente cuando te
levantas de la cama te sientes aletargado y sonámbulo. Esto es algo
completamente normal porque pasaste entre 6 y 8 horas acostado en la misma
posición y tu cuerpo tiene que acostumbrarse nuevamente a la actividad. Si te
bañas con agua caliente, lo que harás a tu cuerpo es hacerle sentir que aún
está dormido ya que esta te aletargará aún más, relajando completamente los
músculos y evitando el efecto que se desea por la mañana que es activar todo el
cuerpo. Pero, cuando te bañas con agua fría sucederá todo lo contrario: Tu
respiración se hará cada vez más rápida como respuesta al cambio de temperatura
(tu cuerpo estará tratando de mantener el calor mediante el aumento de la
ingesta total de oxigeno). Esta respiración profunda todas las mañanas, podrá
aumentar drásticamente tu consumo de oxígeno y la frecuencia cardíaca, lo que
resulta en una dosis natural de energía durante todo el día.
#2
Quemarás grasa: Bañarse con agua fría adelgaza
Aunque parezca mentira, así
es! y aquí va la explicación del porque puede suceder. Existen 2 tipos de grasa
en el cuerpo: La grasa blanca y la grasa marrón. La grasa blanca es aquella por
la que la gran mayoría de personas luchan para que desaparezca (la que se
acumula en la cintura, el abdomen, espalda baja, cuello y muslos). Por el
contrario la grasa marrón no es peligrosa: Su función es la de generar calor
para mantener el cuerpo caliente. Cuando consumimos más calorías de las que el
cuerpo necesita para poder funcionar adecuadamente y dichas calorías no se
queman para obtener energía, se almacenan en forma de grasa blanca y tienden a
acumularse en las partes antes mencionadas. La buena noticia, es que cuando la
grasa marrón se activa debido al frío, tu cuerpo puede llegar a quemar calorías
para conservar el calor, pudiendo así bajar poco a poco los depósitos de grasa
blanca acumulados.
#3
Bañarse con agua fría tiene muchos beneficios para el cabello y la piel
Ayuda a conservar los
aceites naturales de piel y cabello. Mejora la oxigenación de la piel y
cabello. Protege la cutícula del cabello y los poros de la piel. Las duchas
frías harán que tu pelo y piel luzcan más brillantes y suaves. El agua fría
contrae las cutículas del pelo y poros de la piel, evitando que se obstruyan y
por lo tanto será menos probable que pueda acumularse suciedad en el cuero
cabelludo y la piel. Además, puede ayudar a tu piel y cabello evitando perder
demasiados aceites naturales.
Todo lo contrario ocurre con
el agua caliente: seca la piel y el cabello. El agua caliente abre los poros de
la piel, haciendo que estén más expuestos al humo, hollín y polvo de la calle,
y vuelve también el cabello más débil debido al sometimiento del calor
constante.
#4:
Mejora el sistema inmunológico
Un estudio realizado en el
Reino Unido demostró que bañarse con agua fría de forma regular puede aumentar
la cantidad de glóbulos blancos que combaten virus y enfermedades, (en
comparación con las personas que tomaron duchas de agua caliente).
Ventajas de ducharse con agua fría:
Los investigadores del
Instituto de Investigación de la trombosis de Inglaterra sugieren que a medida
que el cuerpo trata de calentarse durante y después de un baño de agua fría,
las velocidades de la tasa metabólica se aumentan y se activa el sistema inmunológico,
lo que conduce a la liberación de más glóbulos blancos.
#5
Cuáles son los beneficios de bañarse con agua fría después del ejercicio
Tus músculos te lo
agradecerán porque:
- Acelera la recuperación muscular
- Aumenta la oxigenación
- Aumenta la circulación sanguínea
- Reduce la hinchazón y la descomposición de tejido
Después de entrenar o hacer
cualquier ejercicio fuerte, lo mejor que puedes hacer es darte un baño de agua
fría o al menos alternar entre fría/caliente.
Existen estudios en atletas
sobre esto en los cuales los han expuesto a baños de hielo después de arduos
entrenamientos y observando numerosos beneficios en su recuperación, debido al
aumento de la circulación sanguínea y la oxigenación. Actualmente es una
práctica común entre muchos atletas de élite como una forma de recuperarse más
rápido, reducir el dolor muscular y el dolor después de intensas sesiones de
entrenamiento o competiciones.
Pero tú no necesitas una
instalación de entrenamiento de alta tecnología con los sumergibles de agua
fría para poder lograr estos beneficios. Simplemente toma una ducha fría
después de realizar ejercicio.
#6:
Ayuda a drenar el sistema linfático
Una adicional pero crucial
parte del cuerpo que está afectada por las duchas frías es el sistema
linfático. Lo que el sistema linfático hace es ayudar a la realización de los
residuos procedentes de las células. Esto es clave en la defensa de tu cuerpo
contra las infecciones no deseadas. Cuando el sistema linfático está bloqueado,
se mostrará en síntomas tales como resfriados frecuentes, infecciones y dolor
en las articulaciones. Cuando en el baño se alterna entre el agua caliente y
fría ayudará a tu sistema linfático, contrayendo los vasos linfáticos cuando se
exponen al frío y relajándolos cuando se exponen al calor. Esto bombea
especialmente el líquido que pueda haberse estancado en los vasos linfáticos,
lo que resulta en un sistema inmunológico más fuerte y más saludable.
#7:
Mejora la circulación
La buena circulación de la
sangre es vital para la salud cardiovascular en general. Bañarte alternando
entre agua fría y caliente es una manera muy fácil de mejorar tu circulación.
El agua fría hace que tu sangre se mueva mejor a través de todos tus órganos
para mantenerlos calientes. El agua caliente invierte el efecto al provocar que
la sangre se mueva hacia la superficie de la piel. Bañarte con agua fría todos
los días estimulará tu sistema circulatorio y te mantendrá más saludable y más
joven que las personas amantes del agua caliente.